The Vampire Diaries 4x23 Graduation

Sabíamos que el capítulo de esta semana de The Vampire Diaries (Crónicas Vampíricas) iba a ser una locura, con tanto ser sobrenatural suelto por Mystic Falls tras caer el velo que separa el mundo de los vivos con el de los muertos. Lo que igual no esperábamos era la intensidad de las historias que en este Graduation 4x23 iban a ocurrir y es por eso que este final de temporada nos ha cogido un poco por sorpresa. 

El papel de Bonnie es fundamental en este episodio, pues se tiene que encargar, no sólo de volver a levantar el velo para que cada uno vuelva al sitio que pertenece, sino que además, tiene que despedirse de sus seres queridos, pues como recordarán, en el anterior episodio había muerto. Y bueno, no se despide directamente, sino que ofrece bonitas palabras para todo el mundo, en especial a su padre. A pesar de lo mucho que quiere quedarse en este mundo, ya no pertenece a él, por lo que una vez cumplido el plazo, y habiéndose graduado junto a sus amigos, el velo vuelve a su sitio. Pero antes, lanza un hechizo para que Jeremy vuelva a la vida. Incluso ya muerta Bonnie es capaz de jugársela. ¿Significa esto que no vamos a volver a verla? Posiblemente sí, porque recuerden que Jeremy puede ver a los muertos por lo que...¡¡nunca se sabe!!

Cada ser sobrenatural que está ahora en Mystic Falls, antes de que Bonnie restaurara el velo, quiere su propia venganza. Los cazadores quieren cazar a Silas y Kol no sólo quiere vengarse de Elena, sino que quiere quedarse en este mundo. Uno de los cazadores, aquél al que Damon dejó morir en la isla, ha disparado al mayor de los Salvatore, con una bala de madera impregnada de veneno de hombre lobo por lo que se requiere la presencia de Klaus para poder salvarlo. Damon intenta hacer tiempo, indicándole erróneamente donde está el cuerpo de Silas, porque en realidad, aún no se han desecho de él. Cuando el cazador se da cuenta, funde a balazos al pobre Damon que necesita una cura urgentemente. Y tras muchas amenazas de Caroline, Klaus aparece!!! Y salva a Damon!!!!

La vuelta de Klaus a Mystic Falls, aunque momentánea, fue simplemente perfecta. No es que llegara demasiado rápida, es que ya había recibido la invitación de Caroline. No le va a regalar dinero por su graduación, le va a hacer un regalo mejor: deja libre a Tyler de volver a Mystic Falls, porque, al fin y al cabo, él ha sido su primer amor, y Klaus quiere ser su último amor, aunque tenga que esperar toda la eternidad para conseguirlo. ¡¡¡¡¡¡¡POR FAVOR!!!!!!! A mi me dicen eso y me caigo desmayada sobre la marcha. Caroline, tienes que irte ya con Klaus!! Todos los fans de Klaroline lo estamos esperando!!

Otra pareja que ha quedado más o menos resuelta en este capítulo ha sido la de Rebekah y Matt. Con el celoso exnovio de Rebekah rondando por Mystic Falls se masca la tragedia. Tanto así, que éste pone una bomba sobre los pies de Matt, pero Rebekah le salva y hace estrellar el artefacto, ya que ella no puede morir. Durante toda la tensión hacen planes para el verano, pero cuando todo pasa, Matt decide que no quiere verse involucrado en relaciones sentimentales con vampiros...pero lo que pasa en la carretera se queda en la carretera, no?? Nos declaramos absolutamente fans de esta pareja y esperamos que, tras un verano juntos, Matt quiera seguir con ella porque está claro que Rebekah quiere cambiar y con el gran corazón que tiene Matt, seguro que lo consigue. 

Aún nos queda algo muy importante por resolver. ¿A quién va a elegir Elena? Finalmente, y como la mayoría esperábamos, Elena se decide por Damon, no sin antes tener una gran conversación con Stefan, a quien le ofrece la cura, pues ella está convencida y ya ha aceptado lo que es. Pero Stefan quiere que se la quede ella, para que realmente, cuando esté segura de verdad, haga lo que quiera con ella. Pero el gran momento es la declaración de intenciones, tanto de Damon como de Elena, en la que se disculpan por ser lo que son, pero no por amarse mutuamente y se enfrascan en un beso de película que nos dejó, a la mayoría sin respiración. 

Pero Katherine no está dispuesta a dejar que Elena sea feliz pues considera que le ha robado su felicidad. ¿Qué dices? Tú mataste a mi hermano!!! Tras una larga pelea, en la que ambas reciben dolorosos golpes, Elena ve la solución a sus problemas y le mete a Katherine la cura, a la fuerza, en la boca. Cuando Katherine despierte, si todo sale "bien", será humana y tendrá que vivir su trágica existencia como tal. 

Ahora sólo queda por resolver lo más sencillo de la ecuación. Arrojar el cuerpo petrificado de Silas por el acantilado para que se pierda en el agua por el resto de la historia. Cual es nuestra sorpresa, y la de Stefan, cuando se da cuenta de que Silas no está en la bolsa. ¡¡Vive!! Su muerte va ligada a un hechizo de una bruja viva. Muerta la bruja, se acabó el hechizo, y ahora por fin podrá mostrar su verdadera cara. La verdad es que esta parte no la entendimos muy bien. Pero ahí lanzo mi teoría. Todo ser sobrenatural puede que tenga un doble en algún lugar del mundo. Silas es el doble de Stefan y ahora va a ocupar su lugar, pues ha encerrado a Stefan en una caja fuerte, y lo ha lanzado por el acantilado. ¿Cómo? Pues sí. Por lo menos esta es la teoría que tenemos en cuanto a los dobles. Es lo único que se nos ocurre, porque la verdad es que dejaron esta parte algo confusa. ¿Qué va a pasar entonces con el verdadero Stefan Salvatore? ¿Cuál es el plan de Silas ahora? Malo malo malo...

Y ahora sí. Creo que no me dejo nada en el candelero. Ha sido un capítulo muy intenso de principio a fin. Y nos han dejado con la miel en los labios por saber qué es lo que va a pasar con Stefan. ¿Cómo se puede ser tan cruel querida Julie Plec?

¿Qué les ha parecido a ustedes el capítulo? ¿Se han quedado tan a cuadros como nosotros? Esperamos sus comentarios!!

XoXo, Mystic Falls