ENTRADA CON SPOILERS
No puedo evitarlo: tengo debilidad por las series de brujas. Y aunque Witches of East End no es tan entretenida como lo pudo ser en un su momento Eastwick o Embrujadas, me encanta la trama. El capítulo de esta semana continúa la trama que habíamos dejado a medias la semana pasada. Freya está atrapada en el cuadro intentando sobrevivir y Joanna está detenida en comisaría.
Ingrid tiene que encontrar la manera de salvar a su hermana, pero su tía está fuera de combate por lo que busca en el Grimorio algún hechizo resucitador para su tía. Cuando lo hace, ésta se enfada pues esa clase de magia siempre trae consecuencias. Si resucitas a alguien a quien quieres, otra persona a la que quieres morirá. Puede que no sea inmediatamente, puede que pase algún tiempo, pero pasará. Pero así es la vida misma. Todos vivimos con una guillotina sobre nuestras cabezas toda la vida.
Freya consigue escapar y Joanna solicita la ayuda de su abogado, al que hacía 50 años que no había visto. La inmortalidad es lo que tiene. Con todo medianamente arreglado, ahora hay que volver a meter al hombre que intenta matar a Freya en el cuadro y deciden enterrarlo para siempre, en la tumba de Marilyn Fenwick, que no es en realidad una tía de la familia, sino que es el lugar donde Joanna guarda el dinero familiar.
Ahora hay que ocuparse de encontrar al cambiaformas que está intentando hundir la vida de las Beauchamp. La verdad es que el episodio no ha sido la bomba, pero me ha parecido bastante entretenido. ¿Qué les ha parecido a ustedes? ¡¡Espero sus comentarios!!
A continuación les dejo el tráiler del próximo episodio de Witches of East End, que llevará por título Today I'm a Witch.
XoXo, Mystic Falls
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