ENTRADA CON SPOILERS
Cada vez leo más críticas negativas en torno a esta serie y la verdad es que no lo entiendo. Vale que no es la gran serie de la historia. Pero sin duda alguna, tras siete capítulos de emisión, cada vez estoy más segura de que Devious Maids no pretende ser una copia de Mujeres Desesperadas. Obviamente, tiene el sello Marc Cherry y también se nota la mano de Eva Longoria por ahí, pero creo que son dos series muy diferentes, claramente firmadas por el mismo autor.
Yo, la verdad, qué quieren que les diga. Cada vez me gusta más esta serie y encima, con el capítulo de esta semana, hemos avanzado un poco más en la historia. Y es que tras ser despedida de casa de los Powell, las chicas deciden prestarle algo de dinero a Marisol, porque obviamente, si tenía dos trabajos es porque lo necesitaba, ya que en Beverly Hills se cobra bastante bien. Pero Rosie enseguida empieza a sospechar de Marisol, cuando estando en el supermercado, una chica la llama Profesora Suárez. Rosie empieza a investigar a su amiga y descubre que ha estado mintiendo, por lo que le pide explicaciones al respecto, aunque no atiende a razones. Amenaza con contárselo a Zoila y Carmen pero Marisol es más lista y le dice que si lo hace, ella contará su idilio con Spence. Es cuando recibe una carta con un dibujo de su hijo, que Rosie se da cuenta de lo que está haciendo Marisol en realidad, y decide ayudarla. ¿De qué manera? Presentándose en casa de los Powell para solicitar el puesto vacante.
Como ya habíamos descubierto nosotros, Remi está empezando a tontear con la cocaína y por fin Valentina lo descubre. Aunque promete no decir nada, se lo cuenta a su madre y Zoila decide poner cartas en el asunto, pues no es la primera vez que ocurre. Así que llama al padre de Remi para que haga algo, y así su madre no tendrá que enterarse ni sufrir. Remi es llevado a rehabilitación, pero antes de marchar le ofrece a Valentina una mirada de odio que da miedo. ¿Podrán volver al punto en el que estaban?
Por otro lado parece que la relación entre Carmen y Sam va avanzando a grandes, aunque ella no quiera reconocerlo. Sin embargo, recibe una gran dosis de realidad cuando se entera de que Sam es feliz con el tipo de vida que lleva, siendo un mayordomo. Carmen dice que nunca podrá casarse con alguien con tan poca ambición, que necesita más y sus palabras hacen pensar mucho a Sam, que decide que tiene razón y va a dar un giro a su vida. Todo ello comenzando por abandonar su trabajo. ¿Se va a quedar sola de nuevo la pobre Carmen? Ya veremos...
¿Qué les ha parecido el capítulo de esta semana? ¡¡Esperamos sus comentarios!!
El próximo episodio de Devious Maids llevará por título Minding the Baby y, como siempre, te mostramos el tráiler para que vayas viendo lo que vamos a vivir la próxima semana:
XoXo, Mystic Falls
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