ENTRADA CON SPOILERS
Posiblemente habrá mucha gente que siguió la serie original durante los 90 que considerará que realizar esta secuela es casi un insulto. Sin embargo otros, como yo, estamos encantado con que 90210 se haya hecho y se siga haciendo. El pasado lunes se estrenó en Estados Unidos la que es su quinta temporada. Y la serie no podría estar más caliente que nunca.
El final de la cuarta temporada nos dejó a todos boquiabiertos. Naomi interrumpiendo la boda de su querido Max, Silver con el gen del cáncer y queriendo tener un hijo antes de que le extirpen los ovarios y el accidente de coche de Dixon. Un final muy dramático, digno de una serie de este calibre.
Y es que es lo que más nos gusta de esta serie. Es un culebrón con todas las letras. Ya lo fue su original en los 90. Porque, ¿para qué vamos a engañarnos? Lo que le pasa a a esta generación como lo que les pasaba a la anterior es digno de culebrón y se encuentra muy alejado de nuestra realidad más diaria. Pero aún así, se trata de una serie que nos encanta.
Nos encantan los lios en los que se mete Naomi. Muchas veces provocados por ella misma, otras en la que la pilla en medio. Como en este capítulo, que fue el toque de humor. Tras irrumpir en la boda de Max se escapa con él hacia Las Vegas para casarse en secreto. Pero su limusina (yo también viajo en limusina por ahí) tuvo un pequeño accidente e hicieron autostop con tal mala suerte de que les paró un atracador de gasolineras y se vieron envueltos en varios atracos y persecución policial.
Navid y Annie intentan localizar a Dixon, que volvía a California para recuperar a Adriana. Cuando alguien les contesta, resulta que es de la morgue. Ha habido un accidente y hay tres cadáveres para identificar. Como no iba a ser de otra forma, el de Dixon no es ninguno de ellos, sino que él está muy grave en el hospital. Adriana, a pesar de haber roto con él, vuelve a California para estar con él en el hospital. Y también regresa la madre de los hermanos Wilson, que ya la echábamos de menos en la serie.
Además, Silver le ha pedido a Teddy que tenga un hijo con ella. Él se lo tiene que pensar, ya que tener un hijo es una responsabilidad enorme ante la que no está seguro de estar preparado. Pero con todo lo del accidente de Dixon finalmente decide decirle que sí a su amiga porque la vida es muy corta y hay que aprovechar las oportunidades cuando éstas se presentan.
PAra rematar la faena, Vanessa está de vuelta y se quiere llevar a Liam a Sudamérica a cumplir con un contrato de una película. Desesperado por encontrar dinero para pagarle a Vanessa su parte y no tener que ir con ella, provoca un incendio en su bar, para que así el seguro tenga que pagarle.
Creo que esta quinta temporada va a ser muy entretenida. El comienzo ha sido muy bueno así que espero que no decaiga. ¿Qué les ha parecido a ustedes? Esperamos sus comentarios.
Y como siempre, les dejo el trailer del próximo capítulo que se emitirá la semana que viene:
XoXo, Mystic Falls
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