ENTRADA CON SPOILERS
Siguiendo con el orden de las reseñas de capítulos que tengo pendientes por hacer, esta vez le ha tocado el turno al quinto capítulo de la tercera temporada de New Girl, que ha llevado por título The Box. La verdad es que la temporada me está pareciendo bastante entretenida, porque la relación de Jess y Nick da bastante juego. Sin embargo, no me parece que esté siendo una temporada brillante. Al menos por ahora.
En el episodio de esta semana, Nick recibe la herencia de su recién fallecido padre: un montón de dinero. En vez de hacer frente a su realidad, se dedica a malgastarlo y después decide dejarlo en la caja que tiene con cosas a las que no quiere hacer frente. Jess descubre que en esta caja hay un montón de facturas y multas sin pagar, con últimos avisos y todo, por lo que decide, a espaldas de su novio, intentar pagar todas las deudas que pueda de Nick, sin que éste se entere. Pero obviamente, termina enterándose, y se monta una gran pelea porque no es capaz de ver la bondad en el acto de Jess. Finalmente, tras momentos tensos con su novia, decide que necesita arreglar la situación e intenta abrirse una cuenta en el banco, todo para que Jess vea que es tan normal como para merecerla. Pero a la hora de la verdad, su novia decide seguirle el juego con sus locuras.
Hablando de bondad de actos, en el capítulo que estamos reseñando, Schmidt se la pasó intentando no sólo demostrar que es buena persona, sino intentando que el resto se lo reconozca. Pero afrontémoslo. Schmidt no es de las mejores personas que existen: es bastante egoísta y siempre busca su propio interés. Cuando por accidente salva a un desconocido, todo cambia para él, pero cuando va a visitarlo al hospital se da cuenta de que hay mucha gente que hace muchas más buenas cosas por los demás que lo que él ha hecho. ¿Veremos a partir de ahora un cambio de actitud en Schmidt? Ya veremos...
Bueno cuéntenme, ¿qué les ha parecido este episodio de New Girl? ¡¡Espero sus comentarios!!
XoXo, Mystic Falls